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Charlotte Elise Brünswick.
2 participantes
:: Documentación :: Expedientes
Página 1 de 1.
Charlotte Elise Brünswick.
Nombre completo:
Charlotte Elise Brünswick Moore
Edad:
19 años
Nacionalidad:
Estadounidense
Grupo:
Infectada
Ocupación:
Camarera en un bar de mala muerte
Orientación sexual:
Heterosexual flexible.
Descripción Psicológica:
¿Nunca has sentido tanta rabia u odio, como para llegar a agredirte a ti mismo?
Tal vez no. Pero Charlotte Brünswick si lo ha sentido, y por eso actúa de esa forma tan violenta contra todos y contra ella misma, también. Quiere hacerse ver, pero lo hace de una forma en la que le perjudica enormemente. Se siente sucia, odiada, aislada, la mayoría del tiempo. Le gusta estar a solas, por el simple hecho de que así, nadie se meterá con ella. Nadie la mirará con malos ojos, ni susurrará cosas a sus espaldas. Charlotte no está bien y hay días en que se da cuenta de ello. Pero es peor, pues lo pasa muy mal. Realmente mal. Nadie sabe cómo ella se siente en realidad. Todo lo que ven es a una chica mal hablada, con muy mal genio y antisocial. Cierto que ella lo aparenta a kilómetros, y que en fin, es así. Porque por mucho que diga lo contrario, no sería cierto. En realidad es así porque se escuda en ello para poder salir adelante sin ser herida. O eso cree ella.
No intentes relacionarte con ella. Pues se cierra en banda totalmente. Se escuda tras un muro de acero, el cual es imposible, o casi imposible, tirar abajo. Si así decides hacerlo, te responderá de malas formas. Incluso, podrías acabar con un ojo morado. Depende de lo que le hayas querido decir. Si has querido cambiar algo de ella, porque piensas que es mejor así, también. No le gusta que le digan lo que debe hacer y lo que no debe hacer. Ella es un alma libre. Independiente, aunque en el fondo sea todo lo contrario. Tiene dos caras, pero la buena, la sensible, el ángel que tiene dentro, está muy escondido, tanto, que nunca sale a la luz. Tal vez lo haga, pero siempre lo hará cuando ella esté a solas. Sin nadie que vea lo vulnerable que puede llegar a ser en ciertas ocasiones. Cree que todo se soluciona auto agrediéndose. Que todo se acabará si se corta con algo afilado, hasta que la sangre brote de su piel a borbotones, o si se quema su preciada lengua, piel… pelo… ha llegado a hacerse muchas cosas ella sola. Y ha acabado muy mal. A los dieciséis años, decidió tirarse por las escaleras de su casa, y acabó en el hospital, en coma un mes entero. Pero como siempre, volvió a renacer. Volvió a levantarse, y a seguir con su mísera vida. Es bastante brusca y orgullosa. Y se nota en su forma de tratar a la gente. Distante y observadora. Se da cuenta de muchas cosas que pasan a su alrededor. Aunque nunca dice nada al respecto, por mucho que pueda arreglar una pelea entre dos amigos.
Su otra cara es mucho más vulnerable. Mucho más humana. Sensible, risueña, y hasta buena persona. Esta cara nunca sale al exterior. Nunca. Pues la esconde realmente bien. Una parte que suele salir a veces, es cuando se pone a pensar en todo, e intenta recapacitar en lo que hace. Se dice a ella misma que esto que hace no está bien. Que debería luchar por ello, y no agredirse porque sí. Pero luego vuelve de nuevo a cerrarse en banda y nada la puede sacar de su burbuja de acero. Si alguien se atreve algún día a quererla de verdad {ya sea como amigo o algo más}, puede que al principio le sea imposible lidiar con ello, pero poco a poco, comenzará a creérselo y puede que saque su faceta de chica normal y corriente. Con buen corazón, dulce y romántica incluso. Aunque sin ser empalagosa hasta la saciedad. Fiel y buena compañera también, hasta protectora. Ahora, si le caes bien, puedes darte con un canto en los dientes, porque eso es impensable. Y si te dedica una pequeña sonrisa, es que te la has ganado de verdad.
No intentes relacionarte con ella. Pues se cierra en banda totalmente. Se escuda tras un muro de acero, el cual es imposible, o casi imposible, tirar abajo. Si así decides hacerlo, te responderá de malas formas. Incluso, podrías acabar con un ojo morado. Depende de lo que le hayas querido decir. Si has querido cambiar algo de ella, porque piensas que es mejor así, también. No le gusta que le digan lo que debe hacer y lo que no debe hacer. Ella es un alma libre. Independiente, aunque en el fondo sea todo lo contrario. Tiene dos caras, pero la buena, la sensible, el ángel que tiene dentro, está muy escondido, tanto, que nunca sale a la luz. Tal vez lo haga, pero siempre lo hará cuando ella esté a solas. Sin nadie que vea lo vulnerable que puede llegar a ser en ciertas ocasiones. Cree que todo se soluciona auto agrediéndose. Que todo se acabará si se corta con algo afilado, hasta que la sangre brote de su piel a borbotones, o si se quema su preciada lengua, piel… pelo… ha llegado a hacerse muchas cosas ella sola. Y ha acabado muy mal. A los dieciséis años, decidió tirarse por las escaleras de su casa, y acabó en el hospital, en coma un mes entero. Pero como siempre, volvió a renacer. Volvió a levantarse, y a seguir con su mísera vida. Es bastante brusca y orgullosa. Y se nota en su forma de tratar a la gente. Distante y observadora. Se da cuenta de muchas cosas que pasan a su alrededor. Aunque nunca dice nada al respecto, por mucho que pueda arreglar una pelea entre dos amigos.
Su otra cara es mucho más vulnerable. Mucho más humana. Sensible, risueña, y hasta buena persona. Esta cara nunca sale al exterior. Nunca. Pues la esconde realmente bien. Una parte que suele salir a veces, es cuando se pone a pensar en todo, e intenta recapacitar en lo que hace. Se dice a ella misma que esto que hace no está bien. Que debería luchar por ello, y no agredirse porque sí. Pero luego vuelve de nuevo a cerrarse en banda y nada la puede sacar de su burbuja de acero. Si alguien se atreve algún día a quererla de verdad {ya sea como amigo o algo más}, puede que al principio le sea imposible lidiar con ello, pero poco a poco, comenzará a creérselo y puede que saque su faceta de chica normal y corriente. Con buen corazón, dulce y romántica incluso. Aunque sin ser empalagosa hasta la saciedad. Fiel y buena compañera también, hasta protectora. Ahora, si le caes bien, puedes darte con un canto en los dientes, porque eso es impensable. Y si te dedica una pequeña sonrisa, es que te la has ganado de verdad.
Atrévete entonces a conocerla mejor, a quererla e intentar ayudarla, aunque de forma sutil, sin querer cambiarla de golpe, porque ella no te dejará hacerlo aunque en su yo interior lo esté pidiendo a gritos.
Historia:
Charlotte nació un diecinueve de marzo. Era un día tormentoso, llovía a mares fuera, en la calle, y en casa de los Brünswick se oían los gritos de la madre de Charlotte, por culpa de que ella no quería salir afuera. Y la verdad, hubiera sido mucho mejor, puesto en la situación en la que se encuentra actualmente. Ya desde que era un bebé, que apenas podía abrir los ojos, parecía tener claro que no quería nacer, ni vivir la vida que le habían dado. Y así fue toda su vida. A los dos años, se encontró en que su madre volvía a estar embarazada de nuevo, y de otra niña. Iba a tener una hermanita pequeña. Aquello ni le disgustó, ni le alegró tampoco. Tan solo tenía dos añitos, así que no podía opinar apenas. Con el tiempo, ambas hermanas crecieron juntas. Se querían y se trataban bien, aunque alguna paliza caía a veces, porque una le había dicho tal cosa o le había robado. Aun así se entendían.
Cierto que todo parecía ir bien. Pero esas niñas crecieron en un mal ambiente. El entorno no era el ideal. Sus padres discutían mucho la mayoría del tiempo, el padre las pegaba, y la madre no hacía nada para evitarlo. La hermana pequeña de Charlotte comenzó a robar cosas, y a comportarse de forma extraña, y Charlotte no se quedó atrás tampoco. Comenzó a auto agredirse. Aquél comportamiento comenzó a los catorce años, después de que la violaran en un callejón cerca del campo de futbol. No volvió a estar con nadie. No ha tenido relaciones sexuales con nadie desde entonces, aunque algunos piensen que es una ninfómana, por su aspecto. La gente creyó que en casa le pegaban. O mejor dicho, que en casa agredían a las dos niñas. Así que por eso las llevaron a una familia de acogida. Su hermana cambió un poco, pero Charlotte no. Aunque sus agresiones fueron a menos, seguía haciéndolo con frecuencia. Tanto era así, que decidieron internarla en St. Martin's Medical Center. Para que así pudieran hacer algo con ella y su gran problema. A su hermana no la internaron, puesto que no parecía ser tan grave como lo de su hermana. Es más, a ella no se le notaba nada, aunque fuera una cleptómana de cuidado. Charlotte la echaba mucho de menos, y es a ella a quien quiere solo. Y a quien valora realmente. Pues siempre fue su mayor y único apoyo. Solo piensa en ella cuando intenta ser fuerte, porque sabe que así podrá verla de nuevo, y comenzar una vida juntas lejos de todos los problemas. Por eso optó por escaparse de aquél lugar. Lo consiguió. Pero sabía que si volvía con sus padres adoptivos y su hermana en aquellos momentos, la cogerian enseguida, y a saber a donde la iban a meter esta vez. Así que no tuvo más remedio que irse, fugarse, de donde estaba.
Le llamó la atención un chico en el tren, y aunque cueste creerlo, ambos comenzaron a entablar una agradable conversación. No dudó entonces en irse con él. Le prometió que le ayudaría en todo. Y que no le importaba cuanto tiempo se quedara en su piso. Al llegar, Charlotte se sintió mucho mejor. Estaba en un lugar donde nadie la conocía. Algo que la tranquilizaba de sobremanera. Aun así, no conseguía dejar atrás las agresiones. Seguía haciendolo. Se empeñó en pagarle la mitad del alquiler a aquél chico, y por eso tuvo que buscarse un trabajo. Encontró uno de camarera, en un bar un tanto asqueroso, pero que por lo menos le pagaban bien. A los dos meses de vivir con aquél chico, él le dijo que se iba. Que debía irse, y que no se preocupara que él le dejaba el piso, y que se encargaría de que siguiese pagando esa misma cantidad que ya le pagaba. A las dos semanas, Charlotte se encontró sola de nuevo. En un piso pequeño, pero que al estar ahora vacio, sin nadie, le parecía inmenso. Con un trabajo de mierda, y con ganas de tirarse por un puente.
Hace cosa de un mes aproximadamente, que se siente mal. Ella lo atribuye a un resfriado mal curado, aunque en si interior sabe que hay algo más. Que eso que le pasa no es normal, pues se está alargando mucho. Al ser tan suya, ha decidido guardarlo en secreto, por ahora. Porque piensa que eso se curará con el tiempo. Lo que no sabe es que está infectada. Y que eso no se curará con nada, es más irá de mal en peor, hasta que acabe con su vida.
Cierto que todo parecía ir bien. Pero esas niñas crecieron en un mal ambiente. El entorno no era el ideal. Sus padres discutían mucho la mayoría del tiempo, el padre las pegaba, y la madre no hacía nada para evitarlo. La hermana pequeña de Charlotte comenzó a robar cosas, y a comportarse de forma extraña, y Charlotte no se quedó atrás tampoco. Comenzó a auto agredirse. Aquél comportamiento comenzó a los catorce años, después de que la violaran en un callejón cerca del campo de futbol. No volvió a estar con nadie. No ha tenido relaciones sexuales con nadie desde entonces, aunque algunos piensen que es una ninfómana, por su aspecto. La gente creyó que en casa le pegaban. O mejor dicho, que en casa agredían a las dos niñas. Así que por eso las llevaron a una familia de acogida. Su hermana cambió un poco, pero Charlotte no. Aunque sus agresiones fueron a menos, seguía haciéndolo con frecuencia. Tanto era así, que decidieron internarla en St. Martin's Medical Center. Para que así pudieran hacer algo con ella y su gran problema. A su hermana no la internaron, puesto que no parecía ser tan grave como lo de su hermana. Es más, a ella no se le notaba nada, aunque fuera una cleptómana de cuidado. Charlotte la echaba mucho de menos, y es a ella a quien quiere solo. Y a quien valora realmente. Pues siempre fue su mayor y único apoyo. Solo piensa en ella cuando intenta ser fuerte, porque sabe que así podrá verla de nuevo, y comenzar una vida juntas lejos de todos los problemas. Por eso optó por escaparse de aquél lugar. Lo consiguió. Pero sabía que si volvía con sus padres adoptivos y su hermana en aquellos momentos, la cogerian enseguida, y a saber a donde la iban a meter esta vez. Así que no tuvo más remedio que irse, fugarse, de donde estaba.
Le llamó la atención un chico en el tren, y aunque cueste creerlo, ambos comenzaron a entablar una agradable conversación. No dudó entonces en irse con él. Le prometió que le ayudaría en todo. Y que no le importaba cuanto tiempo se quedara en su piso. Al llegar, Charlotte se sintió mucho mejor. Estaba en un lugar donde nadie la conocía. Algo que la tranquilizaba de sobremanera. Aun así, no conseguía dejar atrás las agresiones. Seguía haciendolo. Se empeñó en pagarle la mitad del alquiler a aquél chico, y por eso tuvo que buscarse un trabajo. Encontró uno de camarera, en un bar un tanto asqueroso, pero que por lo menos le pagaban bien. A los dos meses de vivir con aquél chico, él le dijo que se iba. Que debía irse, y que no se preocupara que él le dejaba el piso, y que se encargaría de que siguiese pagando esa misma cantidad que ya le pagaba. A las dos semanas, Charlotte se encontró sola de nuevo. En un piso pequeño, pero que al estar ahora vacio, sin nadie, le parecía inmenso. Con un trabajo de mierda, y con ganas de tirarse por un puente.
Hace cosa de un mes aproximadamente, que se siente mal. Ella lo atribuye a un resfriado mal curado, aunque en si interior sabe que hay algo más. Que eso que le pasa no es normal, pues se está alargando mucho. Al ser tan suya, ha decidido guardarlo en secreto, por ahora. Porque piensa que eso se curará con el tiempo. Lo que no sabe es que está infectada. Y que eso no se curará con nada, es más irá de mal en peor, hasta que acabe con su vida.
Familiares:
Robert & Amanda Brünswick:
Padres biológicos de las dos chicas. No tienen mucha relación con ninguna de las dos. Viven en California.
Roger & Susan Williams:
Padres de acogida de las dos hermanas. Siguen viviendo en Kansas.
Joselyn Brünswick:
Hermana menor. 17 años. Vive con la familia de acogida aun.
Padres biológicos de las dos chicas. No tienen mucha relación con ninguna de las dos. Viven en California.
Roger & Susan Williams:
Padres de acogida de las dos hermanas. Siguen viviendo en Kansas.
Joselyn Brünswick:
Hermana menor. 17 años. Vive con la familia de acogida aun.
Enfermedades:
Automutilación
La autolesión o automutilación consiste en hacerse un daño físico cómo método de alivio al sufrimiento psicológico. A veces el dolor psicológico se hace tan difícil de manejar, que se opta por dañar al cuerpo en un intento de controlar la situación. Esto efectivamente alivia, aunque sea por unos minutos. Las sensaciones que se tienen al momento de autolesionarse depende de cada persona y de la situación que se esté viviendo. A veces puede proporcionar calma, en otras un "despertar", hacer sentir "real" a una persona disociada que piensa que ya no siente nada en la vida.
Gustos:
# Fumar
# La Coca-Cola.
# Los gatos.
# Estar a solas.
# Las manzanas rojas.
# La noche.
Odios:
# La gente.
# Los lugares concurridos.
# Los olores fuertes.
# Que la griten.
# Que le digan lo que debe hacer o no.
Fobias:
# A la muerte. Aunque parezca lo contrario.
# Perder a su hermana pequeña.
Otros:
FORTALEZAS
# Vuelve a levantarse después de una caída.
# Resiste a cualquier paliza.
# Su orgullo.
DEBILIDADES
# Su hermana.
# Que le susurren al oído.
# Que alguien le demuestre que la quiere.
SUEÑOS
# Ser alguien en la vida, aunque no lo parezca, tiene sus sueños.
# Tener una vida normal.
SECRETOS
# Estuvo una temporada drogándose cuando tenía catorce años.
# La violaron. { La gente cree que es virgen, puesto que nunca se la ha visto con nadie, aunque tenga fama de zorra}
Charlotte E. Brünswick- Infectado
- Mensajes : 61
Fecha de inscripción : 23/06/2011
Re: Charlotte Elise Brünswick.
FICHA TERMINADA.
Charlotte E. Brünswick- Infectado
- Mensajes : 61
Fecha de inscripción : 23/06/2011
Re: Charlotte Elise Brünswick.
Ficha aceptada. Bienvenida al foro, pásalo bien, en seguida te damos color y rango.
Virginia A. Hadler- Humano
- Mensajes : 110
Fecha de inscripción : 21/06/2011
Localización : Donde nunca puedas encontrarme.
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Lun Ago 01, 2011 11:15 am por Invitado
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Dom Jul 31, 2011 8:42 am por Invitado
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Lun Jul 25, 2011 7:22 pm por Invitado
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Sáb Jul 16, 2011 7:52 pm por Grace Ballato
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Sáb Jul 16, 2011 6:27 pm por Grace Ballato
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Sáb Jul 16, 2011 6:26 pm por Grace Ballato